Dorsoduro, un barrio amplio y fuertemente caracterizado por su internacionalidad, es la zona elegida por artistas e intelectuales para sus talleres y donde se encuentra la magnífica sede de la Fundación Peggy Guggenheim. Al recorrer sus calles se respira un ambiente intelectual y exclusivo, impregnado de arte y poesía, donde es posible encontrar inmuebles particularmente elegantes u otros con el típico encanto bohemio. La horquilla de precios de las viviendas varía mucho según la ubicación, con zonas muy elegantes, elegantes y tranquilas y otras más animadas, donde la vida nocturna es la protagonista. Además de las espectaculares vistas al Gran Canal, también está la larguísima fondamenta delle Zattere, un destino único para pasear por la ciudad con vistas a la Giudecca y a la famosa Basílica del Santissimo Redentore. Las conexiones con tierra firme son muy rápidas y es el único barrio que cuenta con aparcamientos para coches: llegar en coche, aparcar y llegar a su casa en Dorsoduro es realmente fácil y rápido.